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martes, 10 de enero de 2012

La vida de los monos

En el reciento de santuarios y templos de Nikko en  el Japón, encontramos la representación de la vida de los monos en estas esculturas de madera de Hidari Jingoro, 1594-1634, situada en los establos del santuario Toshogu.

La más conocida es la que representa a los monos con sus manos sobre los oídos, la boca o los ojos, aunque hay hasta ocho representaciones diferentes.

Si no estamos dispuestos a no oir, callar y no ver, podemos hacer nuestra versión particular:




Te escucho, utilizo la palabra justa, te siento aunque no te vea


Te puedo acompañar si te sientes solo 
 

Necesito tu consuelo


A veces me divierto, a veces estoy triste
Fotos: Pilar Vidal Clavería
noviembre 2010

2 comentarios:

  1. Qué ciertas tus palabras,Pilar. La verdad que es como debiéramos tomar la vida también y rescatar lo bueno de tanta negatividad de cada día...
    Crear nuestro propio espacio para el reposo, la paz, la contemplación y la entrega...

    Besos,querida Pilar, desde mi Chile (caluroso)...

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  2. Rescatar y aplicar lo bueno en cualquier época del año, en tu verano y en mi invierno.

    Un abrazo Maritza

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