El Vesubio es un volcán activo, su última erupción fue en el año 1944 y la más conocida de sus erupciones es la del 24 de agosto del año 79 de nuestra era, que destruyó en su totalidad las localidades de Pompeya y Herculano.
Cráter del Vesubio, forma actual después de la erupción de 1944
El ascenso desde el parking donde llegan los transportes privados y públicos está a 1000 metros de altitud y desde allí sale un sendero, protegido con unas vallas de madera, que llega como máximo a los 1200 metros, ya que el resto del camino hasta los 1270 metros de su altura máxima está prohibido a los turistas que accedemos para contemplarlo.
El aíre y la temperatura, no tan cálida como en la cercana Nápoles, daban todavía más sensación de frío y desolación.
Camino del cráter del Vesubio
En unos treinta minutos se llega a la cota de 1200 metros desde donde se divisan a la perfección los 360º del cráter, aunque únicamente se recorren unos 180º.
Cráter del Vesubio, forma actual después de la erupción de 1944
Cuando nos encontrabamos en este punto empezamos a ver las primeras fumarolas, mezcla de gases y vapores y que hacían bien patente la actividad del volcán.
De la última erupción, en el 1944, quedan visibles coladas de lava
Fumarolas en el Vesubio
Fumarolas en el Vesubio