Madrid. (EFE).- Entre libros y palabras, el escritor portugués José Saramago se va hoy dejando tras de sí frases que definen el pensamiento de una de las plumas más brillantes del siglo XX.
Literatura
- "Yo no escribo para agradar ni tampoco para desagradar. Escribo para desasosegar" (2009)
- "Sigo escribiendo, intentándolas comprender (las cosas), porque no tengo nada mejor que hacer y sabiendo que llegaré al final sabiendo lo mismo que sabía antes, es decir poco o casi nada" (2007)
- "El triunfo nunca ha sido un objetivo para mi" (2007)
- "En un tiempo como el de ahora, en el que tan fácilmente se desprecia a los mayores, creo que soy un ejemplo muy bueno. Entre los 60 y los 84 he hecho una obra. Por tanto ¡ojo con los viejos!" (2007)
- "Antes de empezar a escribir, tengo que escuchar lo que suena en mi cabeza, porque si acabo una frase con todo sentido, pero a esa frase le faltan armonía y melodía, es que aún sigue incompleta" (2007)
- "No es que sea pesimista, es que el mundo es pésimo" (2005)
- "El escritor es sólo un pobre diablo que trabaja" (2004)
- "Yo no escribo por amor, sino por desasosiego; escribo porque no me gusta el mundo donde estoy viviendo" (2003)
- "Si la literatura pudiera cambiar el mundo, ya lo habría hecho" (1999)
Premio Nobel de Literatura 1998 (Discurso de aceptación)
- "El hombre más sabio que he conocido en toda mi vida no sabía leer ni escribir"
- "Conocí gente del pueblo engañada por una Iglesia tan cómplice como beneficiaria del poder del Estado y de los terratenientes latifundistas, gente permanentemente vigilada por la policía, gente que durante innumerables veces fue víctima inocente de las arbitrariedades de una justicia falsa"
- "No he tenido que renunciar al comunismo para llegar al Nobel"
Entrevista de La Contra de La Vanguardia 9 de octubre 1998