Buscamos información, pedimos consejo, dudamos, ¿qué hacemos? ¿hacia donde nos dirigimos?, volvemos a dudar y a preguntar.
Y aparece Cerato , sus bellas flores tubulares azul cobalto, nos ofrecen confianza, sabiduría, seguridad, ¿alguien se puede resistir a tal ofrecimiento?
Monte Popa, Myanmar
Fotografía: Pilar Vidal Clavería
Counseling integrativo-relacional de duelo y pérdidas
Terapeuta floral
agosto 2007Pero volvamos a nuestro tema: la voluntad. La esencia de la mejor elección es la satisfacción. Se vive como gozo el haber escogido, hay alegría tras haber tomado aquella dirección y no otra. Se practica el acto de ser querido, el cual conduce a poseerse, a ser plenamente uno mismo, y por lo que uno siente que se inclina hacia lo mejor.
Para que todo lo anterior quede más claro explicaremos las fases de la elección:
1. Saber el objetivo que pretendemos. Cuando queremos algo, hay que ser capaz de perfilar muy bien aquello a lo que aspiramos. El adolescente, que aún no está acostumbrado a renunciar —no sabe decir no—, quiere abarcar demasiadas cosas y se dispersa, y la dispersión es la mejor manera de no avanzar, por pérdida de energías. En cambio, cuando ya hay cierta madurez, uno es capaz de coger papel y lápiz para concretar de forma clara lo que pretende. Sobra decir que no es lo mismo hacer un plan de estudios, en una época relativamente cercana a los exámenes, que modificar la irritabilidad del carácter o intentar ser más ordenado.
2. La motivación. Constituye el gran dilema de la voluntad. La voluntad mejor dispuesta es la más motivada, la que se ve empujada hacia algo atractivo, sugerente, que incita a luchar por perseguir esa meta lejana, pero alcanzable. El hombre no puede vivir sin ilusiones.
Enrique Rojas
4 comentarios:
Ser capaces de tomar una decisión es signo de madurez (asumiendo que a veces nos vamos a equivocar). Optar por algo, apostar por algo, creer en algo, intentarlo!... Ir por un camino, decidirse por una dirección, es saberse plenamente capacitado para ello. Y allí es necesaria la valentía y toda la voluntad.
Las ayudas siempre son necesarias y bienvenidas, como también el aprender a amar el proceso que vivmos, con aciertos y errores.
Muchosa abrazos, y mi cariño, querida Pilar.
Que lugar mas impresionante y maravilloso nos enseñas Pilar.
Alfred Victor de Vigny decía:
El querer lo es todo en la vida.
Si quereis ser felices lo sereis.
Es la voluntad la que transporta
las montañas.
Una abraçada.
Arriesgarse desde la ilusión y la esperanza, asumir responsabilidades y rechazar culpas, avanzar, y si el camino es equivocado, rectificar y volver a intentarlo, aprendizaje diario.
Abrazos querida Maritza
Voluntad se escribe con V de victoria, la victoria de conseguir los propósitos que nos iluminan día a día.
Una abraçada Maria Dolors
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