Muchas veces el factor sorpresa también es interesante, cuando algo desconocido nos resulta agradable y nos sorprende su descubrimiento tiene un algo especial.
A veces me ha pasado con alguna película o libro, no saber de que va el tema que trata y encontrarme con que me han gustado mucho, eso tiene para mi un punto añadido que me gusta.
Algo similar me pasó en la exposición temporal que en el Museu Picasso de Barcelona, vi el domingo por la tarde, con Kees Van Dongen, de quien no sabía nada y que me resultó muy agradable, esta exposición se puede ver hasta el 27 de septiembre.
En siete salas se muestran obras que van desde sus primeros años de formación en Rotterdam y París a su paso del tachismo al fauvismo, donde destacan los retratos realizados en esa época, pinturas exóticas y las llamadas de los "années folles".
Kees van Dongen (1877 Rotterdam - 1968 Montecarlo) coincidió en París a principios del siglo pasado con Pablo Picasso y su compañera Fernade Olivier en el Bateau-Lavoir.
En 1905 se presentó en el Salon de Otoño con los fauvistas.
Muchas de sus pinturas me recordaban a Matisse y a Picasso, aunque tienen un estilo propio lleno de luz y color.
Algunos cuadros provienen del Nouveau Musée National de Monaco, donde se celebró el pasado año una exposición retrospectiva del pintor y muchos de los cuadros expuestos están ahora en Barcelona.
A veces me ha pasado con alguna película o libro, no saber de que va el tema que trata y encontrarme con que me han gustado mucho, eso tiene para mi un punto añadido que me gusta.
Algo similar me pasó en la exposición temporal que en el Museu Picasso de Barcelona, vi el domingo por la tarde, con Kees Van Dongen, de quien no sabía nada y que me resultó muy agradable, esta exposición se puede ver hasta el 27 de septiembre.
En siete salas se muestran obras que van desde sus primeros años de formación en Rotterdam y París a su paso del tachismo al fauvismo, donde destacan los retratos realizados en esa época, pinturas exóticas y las llamadas de los "années folles".
Kees van Dongen (1877 Rotterdam - 1968 Montecarlo) coincidió en París a principios del siglo pasado con Pablo Picasso y su compañera Fernade Olivier en el Bateau-Lavoir.
En 1905 se presentó en el Salon de Otoño con los fauvistas.
Muchas de sus pinturas me recordaban a Matisse y a Picasso, aunque tienen un estilo propio lleno de luz y color.
Algunos cuadros provienen del Nouveau Musée National de Monaco, donde se celebró el pasado año una exposición retrospectiva del pintor y muchos de los cuadros expuestos están ahora en Barcelona.