Cariofiláceas

Las flores de Scleranthus, Scleranthus annuus, son especiales y en cierta manera podemos decir que excepcionales, dentro de la familía botánica a la que pertenece las Cariofiláceas, sus flores no son de colores vistosos, sino que son flores verdosas que carecen de pétalos y sus sépalos forman una corona de cinco puntas.

Scleranthus es un remedio floral que nos aporta equilibrio, tanto a nivel personal o tipológico como a nivel transpersonal, recordemos que el verde es un color relajante y que se encuentra en el centro del espectro cromático.

Junto a los senderos y caminos de mis excursiones,  los claveles de montaña y las collejas, son algunas de las especies vegetales que comparten familía botánica con Scleranthus.

Scleranthus, El Jardi de les essències

 Dianthus deltoides, Andorra, agosto 2011
cast. Clavel deltoide, cat. Clavell deltoide

 

Dianthus  seguieri, Colomèrs, julio 2011

cast. Clavelina,  cat. Clavell de seguier

Silene vulgaris. De Colomèrs a Tredos, julio 2011

cast. Collejas, cat. Colitxos

Dianthus hyssopifolius, Nuria, agosto 2010

cast.Clavelina de pastor, cat. Clavell de pastor

Dianthus hyssopifolius, Penyes Altes, julio 2010

cast.Clavelina de pastor, cat. Clavell de pastor

Fotos: Pilar Vidal Clavería

Mirar al cielo con los pies en el suelo

¿Qué nos pasa si miramos al cielo y no mantenemos con firmeza los pies en el suelo?  Puede ser que no materialicemos nuestros proyectos, nuestros sueños, nuestras ilusiones.

Una buena combinación floral para que nuestros objetivos se hagan realidad es la de los remedios Oak y Clematis.

Esta combinación de remedios para mi está representada en dos esculturas que se encuentran en el Port de Barcelona.

Por las aguas del port navegan todo tipo de barcos, grandes y pequeños, de trayectos cortos por el puerto o más largos hacia las islas y pasan junto a estas esculturas, que flotan y miran hacia el cielo, son  El Miraestels, dos obras del artista Robert Llimós.

Son tentetiesos, una figura que siempre me ha gustado porque transmite fortaleza, su capacidad de recuperación es infinita, puedes intentar tumbarlo que él siempre volverá a permanecer erguido, además es un tentetieso que observa, descubre y disfruta de la vida.

El Miraestels, Port de Barcelona, Robert Llimós

El Miraestels, Port de Barcelona, Robert Llimós

El Miraestels, Port de Barcelona, Robert Llimós

 

El Miraestels, Port de Barcelona, Robert Llimós

Fotos: Pilar Vidal Clavería

agosto 2011

La biología de la creencia

La biología de la creencia, título del libro del doctor Bruce H. Lipton, contiene una propuesta que se aleja de las enseñanzas que recibí cuando estudiaba Ciencias Biológicas en la Universidad de Barcelona.

La propuesta que formula Lipton en esta obra es de que el desarrollo de cualquier organismo vivo viene condicionado no sólo por su carga genética,  sino también por su entorno físico y energético.

En 1859 Charles Darwin escribió El origen de las especies, donde afirmaba que los rasgos individuales se transmiten de padres a hijos y sugirió que los factores hereditarios transferidos de padres a hijos controlan la vida de un individuo.

En 1953 Watson y Crick describieron la estructura y función de la doble hélice del ADN, el material del que están compuestos los genes, descubriendo de esta forma la naturaleza de los factores hereditarios sugeridos por Darwin.

Bruce H. Lipton, biólogo celular,  explica en el libro que publicó en el 2005 y que desde el 2007 podemos leer en  castellano, que los genes y el ADN no controlan nuestra biología, sino que es el ADN el que está controlado por las señales procedentes del medio externo celular, entre las que destacan los poderosos mensajes que provienen de nuestros pensamientos positivos y negativos, de ahí la importancia de reeducar nuestra forma de pensar y señala el hecho de que la Epigenética, el estudio de los mecanismos moleculares mediante los cuales el entorno controla la actividad genética, es hoy en día una de las áreas más activas de la investigación científica.

El doctor Lipton trata también en su libro de la impotancia de la membrana celular, verdadero cerebro de las funciones celulares y de los descubrimientos de la física cuántica para la comprensión y el tratamiento de las enfermedades.

En La biología de la creencia, podemos encontrar un capítulo dedicado a la importancia de los pensamientos positivos y su efecto sobre el comportamiento y los genes, aunque es necesario estar en armonía con la programación subconsciente.

Los pensamientos positivos y negativos tienen consecuencias en nuestra salud y en todos los aspectos de nuestra vida y cita una frase de Henry Ford : Tanto si crees que puedes como si crees que no puedes... tienes razón, una frase que corrobora que no son solo los genes los que controlan nuestra vida sino también nuestras creencias.

En el apéndice del libro nos habla de una técnica psicológica basada en la energía llamada PSYCH-K®, creada por el psicoterapéuta  Rob Williams, técnica que permite cambiar en cuestión de minutos las creencias limitantes adquiridas mucho tiempo atrás.

Participé hace dos fines de semana en un taller de PSYCH-K® y pude comprobar el proceso que utiliza,  pruebas musculares de kinesiología y técnicas de integración de los dos hemisferios derecho e izquierdo del cerebro para obtener cambios rápidos y duraderos. Además el PSYCH-K®, tiene en cuenta el espíritu en el proceso de cambio, ya que mediante las pruebas musculares se accede a lo que Rob llama la mente superconsciente para asegurarse de que las metas de la persona sean seguras y apropiadas.

El doctor Lipton estuvo en Barcelona el pasado mes de mayo y participó en el programa de Gaspar Hernandez,  L'Ofici de viure, puedes clickar en su web y oir la entrevista.

Pilar Vidal Clavería Facilitadora PSYCH-K®

Circo de Gavarnie

El espectáculo del circo en esta ocasión no han estado los payasos o los acróbatas, sino la Naturaleza, una vez más en mayúsculas, de la que se disfruta viendo el entorno del Circo de Gavarnie.

El Circo de Gavarnie, lo hemos visto los tres días que hemos estado en la zona de los Pirineos centrales compartida entre Francia y Aragón.

El primer día lo vimos desde el refugio de Serradets, a última hora de la tarde,  sus montañas  sobresalían de la niebla tomando tonalidades rosáceas.

Circo de Gavarnie desde el Refugio de Serradets 2587 m

El segundo día a la vuelta de la excursión al Taillón y también desde el refugio Serradets, las formas de su piedra gris y la nieve destacaban sobre el azul y blanco del cielo.

Circo de Gavarnie desde el Refugio de Serradets 

He encontrado una cita que comparto plenamente de Victor Hugo, donde califica al circo de Coliseum de la Naturaleza, refiriéndose al «edificio más misterioso del más misterioso de los arquitectos».

Además del circo por sí mismo, una de sus atracciones, es la Gran Cascada, una cascada que cae de una de las paredes salvando un desnivel de más de 400 metros.

El domingo por la mañana temprano nos acercamos hasta ella caminando por los senderos señalizados que salen del pueblo francés de Gavarnie y donde el albergue Le Gypaëte nos ofreció una cena excelente.

 Circo de Gavarnie y la Gran Cascada

Detalle de la Gran Cascada en el Circo de Gavarnie





Detalle de la Gran Cascada en el Circo de Gavarnie

En el camino por los senderos hasta la Gran Cascada también aparecieron sorpresas muy agradables por parte de mis queridas flores.

La primera fueron las flores Aconitum anthora,  el acónito amarillo, con la misma forma de casco que el acónito azul, pero con el color de sus flores bien diferente.

Aconitum anthora, Circ de Gavarnie, agosto 2011
Cast. Acónito amarillo, cat. Tora groga 

Las pequeñas flores de la eufrasia alpina, de la familia de las Escrofulariáceas, de la que hablé hace pocos días en una entrada del blog.

  

Euphrasia alpina,  Circo de Gavarnie, agosto 2012
cast. Eufrasia alpina, cat.Eufràsia alpina

Y la más abundante en los caminos las flores blancas de la parnasia.

 

Parnasia palustris, Circo de Gavarnie, agosto 2011

Cast. Parnasia, cat. Fetgera blanca

Fotos: Pilar Vidal Clavería

Llegar a un tres mil

Y un buen día atravesé la brecha

 

Brecha de Rolando, 2807 m, subiendo desde el refugio de Serradets

Ví desde lo alto como volaba el pájaro

Pirineos desde el Taillón, 3144 m

Me maravillé 

Cima del Taillón, 3144 m

Cima del Taillón, 3144 m

Agradecí

Pilar Vidal en la cima del Taillón, 3144 m 
Foto: Jordi Viader

Fotos: Pilar Vidal Clavería

agosto 2011 

Sorpresas con las flores

En los Pirineos orientales la primera cima que sobrepasa los dos mil metros es el Costabona, en mayo del año pasado hicimos una excursión, esperando disfrutar de las vistas desde su cumbre, pero la niebla no lo permitió.

Ayer lo volvimos a intentar y el buen tiempo nos acompañó durante toda la mañana, aunque a partir del mediodía la niebla aparecio de nuevo.

 Cima del Costabona, 2465 m

 

 

Vivac en la Cima del Costabona, 2465 m

A mi ritmo, caminando y disfrutando del paisaje y de las flores, las gencianas son de unas de mis preferidas. Estoy acostumbrada a verlas, en el caso de la genciana campestre, Gentiana campestris, de color lila, y !oh sorpresa¡ ayer las empecé a ver de color blanco, unas flores albinas que destacaban junto a los ejemplares del color habitual.

Gentiana campestris, con flores de color blanco

Gentiana campestris, con flores de color lila

Cómo el tiempo invertido en llegar al Costabona había sido corto, nos decidimos a ampliar la ruta y llegamos a la zona de las Esquerdes de Rojà de 2273 m y al Pic de la Mort de l'Escolà de 2463 m.

Una de las señales hacía el siguiente destino, las crestas de les Esquerdes de Rojà

Crestas de las Esquerdes de Rojà

En la cima de la Mort de l'Escolà 2463 m 
Foto: Jordi Viader

En el camino de vuelta una gran extensión de hojas de color gris con estas flores de color amarillo, recubrían una de las laderas de la montaña.

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Y en los márgenes de los senderos abundaban las flores rosadas de los claveles de montaña.

Dianthus sp
cast. Clavel de montaña, cat. Clavelina

Fotos: Pilar Vidal Clavería

Escrofulariáceas

Cuando elegimos de entre las Flores de Bach, la esencia para el miedo a lo que conocemos como temores de la vida cotidiana, concretos y conscientes, Mimulus, es el remedio por excelencia.

La familia botánica en la que encontramos a las flores amarillas de Mimulus, es la de las Escrofulariáceas.

Muchas de sus especies son venenosas o tóxicas, aunque no es el caso de Mimulus,  Mimulus gutattus, sí lo tenemos claramente en la  Digitalis purpurea o la Digitalis lutea.

El aspecto de sus flores es muy curioso, parecen bocas de diferentes colores. Las especies de esta familia que se utilizan en la elaboración de esencias florales de sistemas como FES, Nestinar o Deva, tienen en la mayoría relación con distintos aspectos de la capacidad de expresión.


 

Mimulus guttatus, Mimulus, Jardí de les essències, mayo 2008

 

Digitalis purpurea, Camino del pantano de Cavallers, julio 2011 

cast. Digital púrpura, cat. Didalera purpúria

 

Digitalis purpurea, Camino del pantano de Cavallers, julio 2011 
cast. Digital púrpura, cat. Didalera purpúria

 

Antirrhinum majus, Montserrat, abril 2011

cast. Boca de dragón, cat. Conillets

 

Antirrhinum latifolium, Puig Tres Canaletes,  junio 2011

cast. Boca de dragón, cat. Conillets grocs

Linaria alpina, Nuria, mayo 2011

cast. Linaria alpina, cat. Linària alpina

Euphrasia alpina, Circ de Gavarnie, agosto 2011

cast. Eufrasia alpina, cat. eufrasia alpina

Solarización de Digitalis lutea 

cast. Digital amarillo, cat. Didalera groga

Fotos: Pilar Vidal Clavería

Recuerdo con colores

Cinco años separan estas fotografías, los colores de estas flores me han transportado al recuerdo de los colores de mi viaje a la India.

Canna indica, Barcelona agosto 2011
cast. Caña de las Indias

Peregrins en Ramdevra, India, agosto 2006

 

Canna indica, Barcelona agosto 2011

Peregrins en Ramdevra, India, agosto 2006

Fotos: Pilar Vidal Clavería

Ranunculáceas

Las familias botánicas constituyen un medio de clasificación de las plantas, lo que se denomina una categoria taxonómica.  Cada especie vegetal pertenece a un género y cada género a una familía botánica, en la que todas las especies que la constituyen tienen unas características comunes.

En el total de los 38 remedios de las Flores de Bach, encontramos 27 Familias botánicas diferentes, aunque existe un patrón que se repite para las especies de la misma familia, cada especie tiene una entidad propia y única que la diferencía de las demás.

Estas diferencias pueden ser muy notorias en algunos casos, así por ejemplo en la familia de las Ranunculáceas, encontramos a Clematis, de entre las Flores de Bach.

Encontramos entre las Ranunculáceas a muchas plantas tóxicas por los alcaloides y glucósidos que contienen. Se trata de una de las familias botánicas más antiguas de plantas con flor (Angiospermas).

Clematis vitalba, Jardí de les essències, mayo 2008

cast. Clemátide, cat. Vidalba

Algunas especies de esta familia que poco nos recuerdan a Clematis son: 

Trollius europaeus, Refugi Ventosa i Calvell, agosto 2011

cast. Calderón, cat. Flor de rovell d'0u

Aconitum anthora, Circ de Gavarnie, agosto 2011
Cast. Acónito amarillo, cat. Tora groga

Aconitum napellus, Circ de Colomérs, agosto 2011

cast. Aconito, cat. Tora blava

Aconitum napellus, Núria, agosto 2010

cast. Aconito, cat. Tora blava

Aconitum pyrenaicum, Circ de Colomérs, agosto 2010

cast. Acónito pirenaico, cat. Tora pirinenca

Aquilegia vulgaris, Collserola, abril 2011

cast. Aguileña, cat. Corniol

Aquilegia viscosa, Rasos de Peguera, agosto 2011
cast. Aguileña, cat. Corniol hirsut

Nigella damascena (cultivada), La Plana, mayo 2011

cast. Arañuela, cat. Flor d'aranya

Fotos: Pilar Vidal Clavería