PILAR VIDAL CLAVERIA. Counseling integrativo-relacional duelo y pérdidas, Máster IL3 Universidad Barcelona, Instituto IPIR. Terapeuta floral. Lic Ciencias Biológicas Univ Barcelona.Información y consultas 652631831.
Este blog es un espacio donde encontrarás información sobre el acompañamiento en el duelo y las pérdidas, la terapia floral y también algunos de mis intereses personales: fotografía, viajes, películas, entrevistas,reflexiones....Gracias por visitarlo y compartirlo
Hacer fotos de las flores era una de las cosas que me hacía más ilusión de estas vacaciones en el sur de Chile y Argentina
Esta primavera está siendo especialmente fría por lo que la floración está algo retrasada, por eso no encontré a los Zapatitos de la Virgen, ni de la Reina, ni de la Princesa, que son tres especies de Calceolaria diferentes, aunque otras muchas flores posaban, no siempre quietas, ante el objetivo de mi máquina Konica.
En Puerto Natales compré el libro Flora Patagonia de Claudia Guerrido y Damian Fernández que fue de ayuda para identificar algunas de las flores que encontré en las excursiones.
La primera flor que hizo parar el coche que alquilamos en Puerto Natales y que nos acompañó durante siete días, fue el notro, Embothrium coccineum, que ha sido sin duda el rey en el viaje, se encontraba en todas las zonas que visitamos tanto en la Patagonia como en la Tierra del Fuego.
Inflorescencia de notro, Embothrium coccineum
Frutos secos de notro, Embothrium coccineum
Otras flores que tanto pueden ser rojas como anaranjadas y que estaban en pleno esplendor eran las mata Guanaco o Lengua de Fuego, Anarthrophyllum desideratum, que forman unos cojines de hasta 60 cm de altura e igual diámetro y son como explosiones de color en el paisaje
Cojín de mata Guanaco o Lengua de Fuego, Anarthrophyllum desideratum
Mata guanaco o Lengua de Fuego, Anarthrophyllum desideratum
Flores deMata guanaco o Lengua de Fuego, Anarthrophyllum desideratum
Y una tercera es la flor de Cascada, estaba en el camino hacía el Refugio Chileno, el día que intentamos ver de cerca las Torres del Paine, y que tiene nieve sobre sus hojas.
El viaje entre Puerto Montt y Puerto Natales lo hicimos en el ferry Evangelistas, un barco con capacidad para 300 personas y donde viajábamos unas 150.
El ferry anclado en Puerto Natales
Estuvimos cuatro días de navegación y las horas fueron transcurriendo de manera agradable, combinando los tiempos de descanso con el disfrutar del paisaje, las comidas y también de documentales interesantes sobre la Patagonia.
Uno de los documentales fue El viaje del emperador que no había visto en el cine y que resultó fabuloso, con unas imágenes bellísimas, de la dura y difícil vida de la emigración de los pingüinos en la Antártida.
Canal patagónico desde el ferry Evangelistas
Atravesamos canales, más o menos estrechos y también en el segundo día navegamos por mar abierta, con unos movimientos que durante un rato hicieron constantes las visitas al lavabo, hasta que ya el cuerpo se habituó y conseguimos dormir toda la noche.
Canal patagónico, con montañas nevadas
El tiempo era frío, por eso el gorro para la cabeza y los guantes fueron imprescindibles para salir al exterior y contemplar el paisaje y las montañas cubiertas de nieve.
En la ciudad de Puerto Montt, primero de nuestros destinos en Chile, encontré a las Flores de Bach, en una tienda de Homeopatía y complementos dietéticos.
Flores de Bach en Puerto Montt
También libros de Flores de Bach que me interesaban:
La segunda edición de Terapia Floral para niños de hoy de Amanda Céspedes Calderón y María Ester Céspedes Calderón.
Las Flores que curan a los niños, Guía para padres y teapeutas de Claudia Mattiello.
Flores energía que sana. Claves para entender cómo funcionan los remedios florales de María Ester Céspedes Calderón y María Cecilia Gálvez.
Y también había llegado hasta allí el Cuaderno Botánico de Flores de Bach, Una guía científica para ver el alma de las plantas a partir de su signatura de Jordi Cañellas.
Los tenían en la libreria Sotavento Libros, en la bolsa de plástico donde pusieron los libros está impreso un fragmento de poesia de Pablo Neruda:
....El viento es un caballo: óyelo como corre por el mar, por el cielo. Quiere llevarme: escucha como recorre el mundo para llevarme lejos. Deja que el viento corra, coronado de espuma, que me llame y me busque galopando en la sombra, mientras yo, sumergido bajo tus grandes ojos, por esta noche sola descansaré....
Puerto Montt es la ciudad de unión con el Chile Austral y punto de partida de vuelos y conexiones marítimas con ciudades como Puerto Natales.
Escultura frente al mar en Puerto Montt
Marea baja en Puerto Montt
Angelmó era el punto de partida de nuestro ferry, es un centro de mercado de pescados de la zona y también de muchos restaurantes
Llegada a Angelmó desde la isla de Tenglo para vender flores
Los colores se viven en Chile de manera intensa, las horas de luz son muchas, amanece sobre las cinco y media de la madrugada y hay sol hasta algo más de las nueve de la noche, por ello aunque esta primavera del 2009 ha tenido unas temperaturas mucho más bajas de lo habitual, tantas horas de luz nos ha permitido aprovechar el día durante mucho más tiempo y disfrutar de sus paisajes.
He escogido el azul como primer color para ver algunas imágenes de la Patagonia chilena.
Glaciar PioXI, en el trayecto en ferry de Puerto Montt a Puerto Natales
Glaciar PioXI, en el trayecto en ferry de Puerto Montt a Puerto Natales
Glaciar PioXI, en el trayecto en ferry de Puerto Montt a Puerto Natales
La vuelta en avión desde Santiago de Chile hasta Barcelona fueron doce horas que tuvieron una sorpresa muy agradable, una de las tres películas que proyectaron en el trayecto fue Adam, no sabía nada de esta película, a la vuelta he comprobado que ya no está en la cartelera, por lo que vale la pena tenerla en cuenta para verla por otras vías.
Se trata de una historia donde la comunicación entre los dos protagonistas, Adam y Beth, resulta especial y mágica, ya que sus realidades aunque distintas consiguen armonizarse y compaginarse aprendido el uno del otro.
Su amistad y su amor los llevan juntos en un camino de descubrimientos mútuos y a los espectadores nos permite desde las butacas, en mi caso algo más cercana a las estrellas, a las que tan unido está Adam, acercarse a los pensamientos y visiones particulares de personas especiales a las que muchas veces nos cuesta entender y que tanto pueden enseñarnos.
Sigo viajando y sintiendo con Flores de Bach y tambien agradeciendo desde el fin del mundo en Ushuaia, a todos los que están acompañándome en estos momentos, porque las cosas se han complicado y mi padre está pasando por una situación díficil y complicada en un centro hospitalario de Barcelona, el sentirme unida a tantos me ayuda en la distancia.
En algunas entradas del blog he hablado de la Integración Sensorial y de mi colaboración con el Centro de Estimulación Infantil de Barcelona ( CEIB) preparando Flores de Bach.
El programa tres14 que Televisión Española emitió el pasado domingo por su segunda cadena, estaba dedicado a la Inteligencia.
En uno de sus apartados se hablaba de la Estimulación Temprana.
Podemos ver a Bàrbara Viader directora del Centro de Estimulación Infantil de Barcelona, explicando del minuto 13:43 al 15:02 el trabajo que se realiza con los niños aplicando Psicomotricidad, Integración Sensorial, juego simbólico y relacional con otros niños.El enlace es el siguiente:
"Hablar del Llullu es mejor que no hablar" y "Enterrar un hijo subvierte el orden de las cosas. Es el silencio"
Estas son dos de las frases que el pasado domingo 18 de octubre aparecían en la entrevista que Màrius Serra realizó en el Cuaderno del domingo de El Periódico de Catalunya.
La primera frase es clarificadora, es una manera de reconocer y de compartir, la segunda es una expresión contundente de dolor.
Transcribo la entrevista desde el respeto y el reconocimiento, por lo mucho que transmite de amor, de ese amor incondicional que se siente hacía los hijos.
Màrius Serra, escritor, Barcelona 1963, manipulador de palabras.
Por Pau Arenós
El Màrius hace fácil la entrevista difícil. Antes de que la primera pregunta, áspera, atraviese el aire ligero del estudio, el Màrius empieza a hablar de la muerte de su hijo Lluís, el Llullu, de 9 años.
"Enterrar un hijo subvierte el orden de lascosas. Es lo más cercano al silencio. Es el vértigo máximo. El silencio. La nada. Hay muy poco que decir: la muerte es el final de todas las historias. Hacía nueve años que vivíamos un duelo, duelos parciales. Desde las cinco semanas empezaron a llegar mensajes muy inquietantes de las cosas que no haría mi hijo. Me dijeron: "Su hijo no caminará nunca". Así que vives un duelo por un hijo que no tendrás. Es un proceso largo que tiene que ver con todas las discapacidades, sean tan severas o menos severas. Esta ruptura de expectativas cada uno la vive como puede. En este momento tan dramático y final te das cuenta que llevas un camino, un empuje que te hace acercarte al duelo de una manera igual de intensa pero menos desesperada".
El silencio. Esta conversación es una conjura contra este silencio.
-Pero, ¿estaba preparado?
-Había imaginado este día. Cuando ví que tenía la necesidad de escribir el libro, Quiet, y de intentar evitar la misericordia y el chantaje emocional, me enfrenté a verbalizar las cosas. Recuperé un episodio que tenía clavadísimo, el entierro de la hija del amigo Oriol, una chica con parálisis cerebral. Un día terrible en que pensé: "Estoy viendo algo por lo que tal vez tengo que pasar". Esto no te arregla nada, pero hace que vuelvas a la palabra más rápidamente.
- ¿Es valiente? ¿Es un adjetivo adecuado o absurdo?
-La he oído. No es absurdo. Es la percepción exterior. "Es que vosotros sí que...". Me miro al espejo y veo que no es un rasgo característico de mi personalidad. El valiente es el que dice: un paso adelante.
-¿Y ustedes se encontraron con la situación.
-Si hay virtud es en cómo reaccionamos.
- ¿Reaccionó con la serenidad que muestra? ¿O hubo y hay altibajos, desesperación, una montaña rusa de sentimientos?
-Hay altibajos y tristeza y melancolía. No ha habido desesperación. Le explicaré cómo lo afrontamos ...Lluís murió estando con nosotros, lo que es un trauma pero que reconforta muchísimo, comparado con otras épocas en que pasó meses en la UCI. Y fue en el bar donde desayuno cada día, en La Vitamínica de Horta. Estábamos comiendo.
- ¿Él dormía?
-Hizo una apnea. Era la semana del golpe de calor. El último día de casal, el 24 de julio. Me llamaron, tenía fiebre, como tantas veces, lo fui a buscar. Entramos en La Vitamínica porque había aire acondicionado. Y allí hizo una apnea de la cual ya no se recuperó. Desayuno cada día en La Vitamínica desde el año 90. Empiezo mi día allí y normalmente en la mesa en que se produjo aquello. Pensamos: "¿Qué vamos a hacer?".
- ¿Han vuelto?
-Nos preguntábamos: "¿ Entraremos más o no?". Los del bar son amigos ... Hicimos de tripas corazón. Estamos contentos de haberlo hecho porque si no se hubiera convertido en un tabú ...
-... y no habrían vuelto nunca más.
-Teníamos cuatro billetes para viajar a Canarias el lunes 27 de julio. Él murió el viernes, y el domingo 26, habiendo hecho todo, estábamos en casa por la noche. "¿Nos tenemos que quedar?". Y nos fuimos.
- ¿Ha vuelto a sentarse en esa mesa de La Vitamínica?
-Sí. Cogimos el avión y hasta al cabo de un mes no volvimos. Todos los recuerdos de La Vitamínica son dulces, aunque podría haber sido un infierno. Y esta decisión de volver al bar sí que la tomas...Lo que usted decía antes de la montaña rusa: en las Canarias, rodeados de turistas, nos encontrábamos fatal. Cada uno lo somatizó. Yo empecé a tener una cojera tremenda, mi mujer,Mercè,cargandola bolsa de la máquina de fotografías, no aguantaba el dolor de riñones, y mi hija Carla, a punto de cumplir los 14 años, un dolor de estómago... Todo era por la tristeza. Tuve pesadillas prácticamente cada noche. Pero nunca una cosa de desesperación, sí de tristeza y melancolía. Desde que hemos vuelto, cada día del mundo hemos hablado de Llullu.
- El día a día se le ha vaciado de rutinas y esfuerzos.
-El vacío lo podemos mitigar con el relato. Él emitía muy pocos mensajes. Ahora aparece una paradoja muy irónica y muy jodida: todo es más fácil. Y a nosotros nos jode que sea fácil.
-Me decía enun e-mail: "La herencia que nos deja el Llullu es inmensa".
-El Llullu ha dejado una forma diferente de mirar. Se puede hacer una lectura social, la de quitarse el complejo de culpa. Cuando tienes un problema parece que no te lo puedas pasar bien. Para llorar siempre se está a tiempo. El libro Quiet y sobre todo el concierto, Muévete por los quietos, lo provocó él. Yo era un médium. Personalmente la herencia es brutal. Nos modificó a todos los que tuvimos contacto con él.
- ¿Cómo cambió usted?
-Tengo menos ganas de juzgar a la gente. La crítica la mantengo, pero enjuiciar ... Darse cuenta de la tontería de las cosas del día a día, del ámbito profesional, cosas que parecían gravísimas ... Miro diferente: las cosas invisibles, que se han hecho visibles, no lo sé, este peldaño ...
- ¿Alguna creencia nueva?
-Mi experiencia es que se ha reforzado la terrenalidad. Si hay alguna conclusión es que hay que disfrutar cada minuto de una manera intensa, tal como ha sido en estos nueve años. Cada vez que nos dieron de alta en el hospital era una fiesta, una fiesta pantagruélica. ¡Celebrar que te dan el alta!
-Todo es simbólico. Usted no para de hablar, verbívoro, y es muy activo. Tuvo un hijo que no se movía y no hablaba.
-Sí, sí. Una paradoja absoluta. Una gran cura de humildad. Tocar, no hablar, ha sido una exploración.
-Las palabras son sanadoras.
-La palabra mitiga. No cura. Hablar del Llullu es mejor que no hablar. En el caso del duelo es clarísimo. Tenerlo presente con naturalidad. Y eso es a través de las palabras, que forme parte del relato. En este caso el silencio del tabú es enfermizo.
- ¿Confía menos en las palabras?
-No es que confíe menos, es que confío en otras vías, en el tacto.
- ¿Cómo nació el nombre, Llullu? Ahora da nombre a una categoría, los llullus.
-Todo fue para intentar neutralizar un familiar que le decía Sito, de Luisito. Y el aceptó el entorno, que es muy importante en estos chavales, cuidadores, monitores, la gente del autobús. Me quito el sombrero ante ellos. Deben hablar con seres que no responden.
-Lleva las camisas limpias. El Llullu ya no le babea.
-Sí. Es una putada. Tanto que me gustaba ir babeado...
- ¿El humor como salvación?
-Para mí, clarísimo. El humor tiene la capacidad de cambiar el tono con que el entorno inmediato, amigos, familiares, afrontan aquello.
- ¿Por qué viajaban tanto con Lluis? Incluso fueron a Hawai. ¿Un reto?
-Sí, un reto. Ya viajábamos mucho antes. Había un punto de reto, de ilusión, y teníamos la posibilidad de hacerlo. Y de enfrentarse a él.
- ¿Qué escribe?
-Una ficción y con voluntad de género. No novela negra estrictamente. Quiero divertirme y alejarme un poco de la biografía.
-Se acerca a los 7.000 crucigramas. ¿Con qué palabra se queda?
-Clavado, desde que le encontré la broma. Idéntico a Jesucristo. Tiene doble sentido.
-Si la palabra fuera Màrius. ¿Cuál sería la definición?
-A mí me han hecho, sobre todo, anagramas, re us rimarà. O res us amarri. Le regalo un palíndromo: Millet té llim. Es de actualidad.
El doctor Edward Bach en su última conferencia pública en octubre de 1936, estableció unos principios esenciales, uno de los cuales decía:
La mente es la parte más sensible de nuestro cuerpo y por eso, la mejor guía para indicarnos cuál es el remedio adecuado
Dennis Genpo, explica en esta entrevista la necesidad de calmar la mente dándonos permiso.
Dennis Genpo, Maestro Zen: "Mi felicidad no depende de lo que me pase"
Entrevista en El Periódico de Catalunya el 2 de julio 2008
Un desengaño amoroso le llevó a refugiarse en el desierto. Allí despertó de nuevo a la vida, y esa experiencia le inspiró la técnica de la Gran Mente.
GASPAR HERNÀNDEZ
--¿Cómo puedo calmar la mente?
--Dándote permiso. Para conseguir algo o ser alguien, primero tenemos que darnos permiso. Nuestra mente está muy ocupada, y no tenemos tiempo de conocerla realmente. Tratamos de aquietarla o de encontrar felicidad y gozo, pero es casi imposible conseguir una mente silenciosa sin darnos permiso. Y sin ningún tipo de técnica.
--Usted ha inventado la técnica de la Gran Mente, que bebe de la psicología.
--Sí. Es una técnica basada en el diálogo de voces, generado por dos psicólogos. Pero en el fondo viene de Jung y Freud. Se trata de convertirnos en presencia, despertar, consciencia. Siempre estamos buscando, tratando de encontrar algo, y en ese estado es imposible. Quien busca es el ego o el yo. Pero esa parte no es nuestra naturaleza esencial.
--¿Y cuál es?
--La que está en paz y no necesita nada. Mire, nuestra mente funciona como si tuviera una marcha puesta y no supiera entrar en punto muerto
--¿Cómo consiguió usted entrar en punto muerto?
--Un día, con 26 años, tuve problemas con una relación sentimental y decidí irme al desierto. Yo entonces tenía muchos problemas de diversa índole. Y cuando estaba solo contemplando la arena y las dunas tuve una gran experiencia de despertar. Mi vida entera se transformó.
--¿En qué sentido?
--Me di cuenta de que podía vivir totalmente en paz. El cerebro tiene dos raíles, como la vía de un tren. Está el raíl izquierdo y el raíl derecho. El izquierdo siempre quiere más, avanzar hacia adelante, no deja de pensar; el derecho es radicalmente lo opuesto: no va a ninguna parte pero ya está en paz. Son los hemisferios del cerebro. A partir de entonces me quedé en el raíl de la paz. Y estudié durante 24 años con un maestro zen, hasta que murió.
--Supuso un cambio radical en su vida porque, antes de esa experiencia, usted era hombre de negocios y deportista.
--Yo era un nadador muy disciplinado y competitivo. Entrenaba entre cuatro y ocho horas diarias. Mi maestro zen me dijo que nunca me daría cuenta de cuánto había obtenido de la práctica del deporte.
--Cuéntenos más cosas de los raíles de la vía de tren.
--El lado izquierdo es el hemisferio de la mente pequeña, el derecho es el de la gran mente. El izquierdo trabaja analíticamente, está limitado, constreñido, y nos separa del resto de la existencia. El derecho es creatividad, intuición, instinto; ahí no hay fronteras, no hay límites, no estamos separados de los otros seres y somos el mismo ser.
--¿En qué me puede ayudar su técnica de la Gran Mente?
--Te da la capacidad de ser libre y de poder elegir ante las decisiones. Yo experimento una felicidad incondicional. Mi felicidad no depende de lo que me pase. Por supuesto, cuando hay una razón para estar triste o enfadado puedo estar triste o enfadado, pero la tristeza o el enfado desaparecen muy rápidamente si lo deseo, y si estoy en ese lugar.
--¿Cómo es ese lugar?
--Es un lugar de vacío.
--Qué miedo.
--No, en absoluto. Es el momento presente.
--¿Cómo se aprende a estar en el presente?
--Estando. Cuando vivimos en el presente, estamos en la mente que no busca.
--¿A través de la meditación?
--Exacto. La meditación verdadera es estar con lo que sencillamente es. Y dejar que cualquier cosa surja, sin intentar controlarla o liberarnos de ella. Estar con lo que hay. Eso es.
--Pero el tiempo pasa, y cada vez más deprisa.
--El tiempo es un fenómeno interesante, porque es solo un concepto. Nunca respiramos en el pasado o el futuro, sino justo aquí y ahora. Los sonidos que oímos son los de ahora. Nunca oímos el pasado, a no ser que escuchemos la radio.
-¡La radio es presente!
--Quiero decir una grabación. Y lo mismo es aplicable a nuestros sentidos. Pensamos en presente, hablamos en presente y, en cambio, vivimos en el pasado o en el futuro, lo cual es una locura y nos hace disfuncionales. Por tanto, si queremos vivir una vida libre, tenemos que aprender a hacer este cambio para vivir en el presente.
--¿Y si alguien nos quiere mal?
--Los enemigos son nuestros maestros, siempre y cuando les permitamos serlo. De hecho, cualquier cosa puede ser nuestro maestro si queremos aprender. Cuando estamos despiertos, viviendo en el presente, todo nos enseña algo. Dejamos de ser víctimas y nos convertimos en señores de nuestra propia vida. Y en vez de ver a los demás como enemigos, los vemos como maestros.