
¿Qué hacer cuando la violencia irrumpe en la vida cotidiana?
¿Qué escoger la venganza o el perdón?
Anton es un médico que reparte su tiempo entre Dinamarca y África, está separado de su esposa y tienen dos hijos, Elias, el mayor, tiene diez años y en la escuela sufre el acoso de algunos de sus compañeros.
A la escuela de Elias llega Christian, vivía en Londres, acaba de morir su madre de cáncer y tiene mucho camino por delante para superar su pérdida, rápidamente ambos niños establecen fuertes nexos de unión.
En una sociedad idilíca como la danesa, la directora trata la amenaza de la violencia cuando proviene de donde es menos previsible, de los niños, unos niños que aprenden los riegos que entraña utilizar la violencia, a pesar del comportamiento de Anton, capaz de poner la otra mejilla ante la fuerza bruta de una agresión física.
En un mundo mejor, ha sido la ganadora al Oscar a la mejor película de habla no inglesa en el 2011 y lo ha sido con su título internacional, mucho más esperanzador que el título con el que se presentó en Dinamarca, Haevnen, y que se traduce por Venganza.
La pretensión de su directora con esta película no es aportar respuestas, sino que entretenga y que funcione como un aviso para el público, para pensar en los diversos temas que aparecen y reflexionar sobre lo qué hacer en determinadas situaciones como las que van apareciendo a lo largo de su proyección.